El mundo que queremos

Se llama desarrollo sostenible aquel desarrollo que es capaz de satisfacer las necesidades actuales sin comprometer los recursos y posibilidades de las futuras generaciones. Por ejemplo: Si se talan árboles para hacer papel, que se planten mas árboles para que no se agoten, esto es una actividad sostenible. Pero consumir petróleo no es sostenible con los conocimientos actuales, ya que no se conoce ningún sistema para crear petróleo a partir de la biomasa.Por lo tanto los ciudadanos/as no debemos malgastar la energía y utilizarla racionalmente.
Para ahorrar energía fuera de casa debemos utilizar los transportes públicos, ir en bicicleta, utilizar un mismo coche para transportar varias personas, tirar los plásticos y papeles a sus contenedores de reciclaje, etc.
En la casa podemos contribuir en ese ahorro bastante si apagamos las luces cuando no las necesitemos, cerramos las puertas del congelador, reciclamos, dejamos la puerta del congelador abierta si tiene mucho hielo, apagar la televisión si no la estamos viendo, etc.
Al construir también podemos ahorrar energía si orientamos la casa bien, si la orientamos hacia la luz solar, podremos aprovechar el calor y la luz.